viernes, 17 de octubre de 2008

porquenohayporque

Perdido el orden
todo da igual
en contradicción
al margen de la maniática clasificación.

Cuanto quiero comprender mi causa, al menos verla o descifrarla.

Bailo entre sombras que no existen, siento frío y no lo hace.
Corro a buscar, llevando puesto lo que encontrar
¿Donde está mi voz, cuando no hablo? en un salto hacia el vaivén
de una niña desdichada.
Salgo, en vez de entrar, río y lloro a la vez.
Estoy loca y soy la más cuerda, amo y odio a la vez.
Me fui del mundo, y entré al universo.
Caigo una y otra vez en mi trampa maldita, la del ojo o la del querer.
Soy mi enemiga, cruel e inclemente o mi amiga del alma.
Cierro puertas y tapio todo.
Me muevo en espiral recurrente agotando mis fuerzas.
El tiempo es la liebre y yo la tortuga.
Me muero por vivir y así muero en vida.
Todo y nada.
Sin saber, la oscuridad agudizó mi vista y ahora veo donde nadie ve, todas las caras de la moneda.

¿Por qué entrelazamos palabras que nos calman?
Por qué te quiero querer si no es lo que quiero?
Por qué no hay porque?

Y cuando ya no puedo más, estallo en un simple:
¡¡¡¡¡¡a la puta mierda!!!!!!!!!!
y entonces descanso…hasta la próxima vez.

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